Las enfermedades psicosomáticas son el 25% de casos de las personas que acuden a una consulta médica primaria por síntomas físicos. El desequilibrio emocional supera el 30% de la población. Cuando uno piensa en enfermedades psicológicas, cree que sus síntomas serán de tristeza o pena; sin embargo, la ansiedad, el estrés y la depresión actúan sobre nuestras hormonas, nuestro sistema inmunológico y pueden facilitar el origen de graves enfermedades. El 70% de dolores musculares y molestias son producto de una mala digestión, de no respirar bien, dormir mal, entre otros. En otros casos nuestro ritmo de vida acelerado, que nos supera, crea un impacto en muchos órganos y sistemas, que causan desde un dolor de cabeza hasta palpitaciones, sequedad de boca, dolores musculares, cansancio, gastritis o dificultades para miccionar. Muchas enfermedades como el asma, el colon irritable o la disfunción sexual, tienen un origen en un desarreglo emocional que tiene que ser tratado a tiempo.